Con 15 gigantescos moais tallados en piedra alineados en una plataforma de 200 pies de largo y una ubicación remota enmarcada por el inminente volcán Rano Raraku y el océano, Ahu Tongariki es nada menos que espectacular. Para muchos visitantes, esta es la atracción estrella de la Isla de Pascua, y al mirar las imponentes figuras, la más grande de las cuales mide 14 metros de altura, es difícil no quedar asombrado por la gente Rapa Nui, que logró la hazaña aparentemente imposible de tallando y moviendo las rocas de piedra de 30 toneladas a su percha frente al mar.
Ahu Tongariki es el sitio ceremonial más grande jamás construido en la isla, presenta la mayor cantidad de moai jamás erigidos en un solo sitio, y cada estatua es única, con solo una con el icónico "pukao" de roca roja o tocado ceremonial. Aún más asombroso, considerando el tamaño y el peso de las estatuas, es que el sitio fue destruido casi por completo por un tsunami en 1960, con las rocas arrojadas más de 90 metros tierra adentro. Desde entonces, el ahu ha sido cuidadosamente restaurado, un proyecto que llevó cinco años a los arqueólogos chilenos Claudio Cristino y Patricia Vargas y que finalmente se completó en 1995.