Uno de los puertos marítimos más grandes de Gran Bretaña, la ciudad de Glasgow alberga una arquitectura medieval épica, castillos históricos y rascacielos contemporáneos. Es un verdadero destino para los viajeros que buscan profundizar en el folclore europeo, el arte de la vieja escuela y la música y la danza tradicionales.
Cómo llegar a Glasgow
Glasgow se encuentra en el centro oeste de Escocia, a orillas del río Clyde. La mayoría de los viajeros acceden a la ciudad a través del puerto o el ferrocarril, ya que dos estaciones principales dan servicio a Glasgow. Los autobuses públicos y los automóviles privados también son opciones populares para los visitantes. El centro de la ciudad es amigable para los peatones y el metro sirve como otra opción para destinos un poco más alejados.
Un día en Glasgow
Vale la pena explorar esta ciudad histórica y un solo día es tiempo suficiente para probar un poco de lo que hace que la ciudad más grande de Escocia sea tan única. Pase una tarde vagando por las concurridas calles de Glasgow, que son fáciles de recorrer gracias a un sistema de cuadrícula formalizado. Visite las ornamentadas salas de la ciudad de Glasgow para conocer la política y la arquitectura de estilo victoriano de la zona. Luego diríjase a uno de los distritos comerciales más importantes, como Argyle Street y Buchanan Street, donde las tiendas de lujo y las boutiques exclusivas ofrecen lo mejor en productos locales y de diseño. Luego, diríjase a los cuidados terrenos de la Universidad Caledonian de Glasgow para disfrutar de la vida universitaria en esta próspera metrópolis. Por último, asista a una actuación en el Pavilion Theatre o en el Glasgow Royal Concert Hall, o relájese con una película en Cineworld, el cine más alto del mundo.
Información del puerto
Los barcos atracan en Greenock Ocean Terminal (puerto de cruceros de Glasgow) , y aunque el lugar ofrece algunas compras ligeras, recuerdos y acceso a Internet, no hay mucho para mantener a los viajeros en Greenock. Afortunadamente, se puede acceder a Glasgow a través de una de las dos estaciones de tren, o en autobús público o metro. Escocia usa la libra esterlina, pero el dinero intercambiado a menudo se mezcla con billetes escoceses. Solicite cambio en libras esterlinas para asegurar un uso más fácil fuera del país.