Como capital de Costa Rica, San José es una ciudad bulliciosa cuyo bullicio metropolitano contrasta con las maravillas naturales que la rodean. Antes de acudir en masa a la selva tropical biodiversa del país en busca de vida silvestre, cascadas y volcanes Arenal y Poás, deténgase para familiarizarse con la grandeza neoclásica de San José. La ciudad cuenta con museos dedicados a todo, desde jade y oro hasta insectos y ciencias naturales, y acoge teatros, iglesias y catedrales. Una vez que se haya llenado de cultura, salga de la ciudad con un tour de canopy a través del Bosque Nuboso de Monteverde, rafting en el río Pacuare o un baño en Baldi Hot Springs.