Con sus ondulantes lagos, antiguos bosques de quinua y un extenso bosque nuboso contra un horizonte irregular de picos rocosos, el Parque Nacional El Cajas es un patio de recreo natural para los viajeros aventureros. Famoso por su variedad de vida silvestre nativa, el parque alberga venados de cola blanca, pumas, tapires, llamas, gaviotas andinas y cola de metal de cola violeta, así como especies raras como el cóndor andino y el puma, y flora colorida como orquídeas silvestres y bromelias raras.
La reserva de 29.000 hectáreas está salpicada de unos 230 lagos y una vasta red de senderos para caminar, lo que la convierte en un lugar privilegiado para practicar senderismo, pesca con mosca, paseos a caballo y acampar. Destacan los miradores Tres Cruces y Avilahuyco, el lago Toreadora, la laguna Taitachungo y Lagartococha.